Con esta excursión a Rotterdam y La Haya desde Ámsterdam visitarás algunas de las ciudades más importantes de Holanda. Recorreremos Rotterdam, que te cautivará con su arquitectura experimental y moderna. Luego daremos un paseo por La Haya, conocida como “la ciudad Real junto al mar”.
Saldremos a las 9:00 y en apenas una hora recorremos la corta distancia entre Ámsterdam y Rotterdam. Muchos sitios históricos de Rotterdam fueron destruidos durante los ataques en la Segunda Guerra Mundial, por lo que la ciudad tuvo que ser reconstruida, adoptando así el estilo contemporáneo y de arquitectura innovadora que la caracteriza actualmente.
Nuestra primera parada será frente a la escultura “El hombre sin corazón” del artista Ossip Zadkine, que representa el dolor de los roterodamenses tras la destrucción de la ciudad en 1940.
Continuaremos el tour visitando otros sitios y monumentos emblemáticos de Rotterdam, como la Iglesia de San Lorenzo (la única construcción medieval que quedó en pie), las conocidas Casas Cubo, el Puerto Viejo (Oude Haven) y el famoso Markthal, primer mercado cubierto en Holanda, lleno de restaurantes y cafés con excelentes ofertas gastronómicas. Allí tendremos tiempo libre (30 minutos) para recorrer todos sus puestos y contemplar su cúpula, en la que se puede ver una de las obras de arte gráfico más grandes del mundo.
Después de conocer el Markthal, daremos un paseo por la zona costera del río Mosa, donde encontraremos imponentes rascacielos, la torre Euromast y el puente Erasmo.
Tras finalizar nuestra visita por Rotterdam, emprenderemos camino a La Haya, una de las ciudades más importantes de Holanda, no sólo por ser la sede gubernamental, sino también por sus numerosos monumentos, distritos históricos y su ubicación cercana a la hermosa costa del Mar del Norte.
Allí conoceremos los lugares más destacados de la ciudad, tales como el Palais Noordeinde, en donde desempeñan sus funciones el Rey y la Reina; el Binnenhof, un complejo arquitectónico que alberga al Parlamento Neerlandés y el Museo de Mauritshuis, que atesora obras de prestigiosos artistas, como “La clase de anatomía del Dr. Tulp” de Rembrandt.
Luego, tendremos tiempo libre para comer en uno de los restaurantes del centro.
Antes de emprender el camino de regreso a Ámsterdam, haremos una última parada frente al Palacio de la Paz, para admirar este majestuoso edificio en el que se encuentra la Corte Internacional de Justicia.
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