La relación calidad precio es perfecta. El hotel correcto, las comidas copiosas, caseras y variadas (aunque el desayuno es básico, pero es algo que para mí no es esencial en un viaje). Las comidas gastronómicas fuera del hotel insuperables, platos típicos gallegos y mariscada. Las excursiones geniales, sobre todo la visita a los pazos y Santiago de Compostela. En Ourense, tuvimos un día de calor insoportable y fastidió la visita. El guía acompañante de diez, el conductor también. Los pequeños inconvenientes que hayan podido surgir son irrelevantes. En general, ha sido una semana estupenda y lo hemos disfrutado. Repetiremos otro circuito con esta compañía.